martes, 21 de mayo de 2013

El Club de la Milanesa discrimina


El Club de La Milanesa Discrimina.

por Una Diva en Tablada (Notas) el miércoles, 2 de enero de 2013 a la(s) 22:25
Resulta que Rosario es tan hermoso, sus calles avenidas, su gente y los Rosarinos tenemos esas cosas de juntarnos, de compartir, en cualquier casa siempre hay una guitarra o alguien que la trae, cantamos hasta el amanecer. El Río, la Florida, la cantidad de espectáculos y artistas que llegan y se quedan, que son de acá y no se van más. Hace unos años Rosario se perfila como una ciudad turística, es cuna de convenciones y genera mucho arte. Del bueno.
Yo cuando tengo la oportunidad de salir con mis amigos a comer a una parrilla como “Lo mejor del centro” o El Ancla que tiene la mejor predisposición, La Vie en Rose con su carta francesa, ir a El Cairo, a Jekyll & Hyde, a tomar unos tragos al Berlin, a comer una tartas en Almacén de Folk o a cualquier lugar de Pellegrini, vamos no lo dudamos, porque esta ciudad tiene una gastronomía excelente. Y muchas veces nos cargan porque los tres nos la pasamos comiendo (Pablo, Fabri y yo), pero las cenas son solo una excusa para lo que realmente nos convoca.
Quiero decir que jamás hemos tenido un problema semejante, todo lo contrario, la gente siempre le ha demostrado su afecto, aunque muchas veces le cambien el nombre.
Fabricio Simeoni, para el que no lo conoce además de ser Figura pública en Facebook, Es “Rosarino Distinguido”, tiene “La llave de la ciudad”, e inmensos reconocimientos por su obra. Si vas a la casa la tiene empapelada de cuadros, diplomas, etc. Es periodista, escritor, tallerista, trabaja con los pibes del IRAR, etc., porque nunca se queda quieto. Nunca.
El 1 de Enero fue a cenar a “El Club De La Milanesa” (Alvear y Jujuy- Rosario) y no comió, porque a pesar de estar sentado la moza no accedió a darle un espacio, donde quitando una silla tuviera acceso la silla de ruedas, argumentaba que la misma le impedía el paso.
Tampoco hizo nada el encargado que ahora dice en la web que él no sabía que
Fabricio era conocido, “sino no hubiese pasado”. Lo que es aún más terrible. Le pidieron disculpas por teléfono, y también le echaron la culpa a la moza por la red.
Yo pensé que estas cosas en el 2013 no pasaban, ya que la ley contra La discriminación está.
Parece que Rosario además de hermoso también tiene gente de mierda, con dificultades mentales para razonar. Por eso la otra gente maravillosa “Mañana jueves 3 de enero, nos juntaremos desde la hora 19 en Oroño y Jujuy (Rosario) para realizar un acto poético de resistencia contra todo tipo de manifestación discriminatoria. Leeremos poesías junto al Fabri con nuestras sillas de ruedas, muletas, trípodes, mesitas de televisor sin televisor o lo que fuere. La poesía es un acto de resistencia, y es lo que sabemos hacer. Habrá poetas, músicos, periodistas, amigos y artistas en general”, dijo Pablo Castro.
 Y eso es lo que haremos. 

Stand Down Poético.


Apuré mi trago, me pinté las pestañas y corrí al Berlín. No quería perderme detalles, me daba mucha intriga esta junta.
A todos los conocí de manera diferente y en otros momentos de mi vida, jamás pensé quererlos  tanto y verlos juntos en un escenario.  Y ahí estaban,  bajo las luces violetas del bar de la cortada. Poco a poco nos fueron dejando entrar a su mundo, compartiendo, tejiéndonos entre su arte y los chistes.
Éramos un público completamente entregado,  perdidos en su compás, en su “manera de”.  
Stand Down poético tiene una fuerte base en la amistad, el encuentro de estos artistas en la vida, que han sabido llevar y entrelazar sus dotes en el escenario. Tomándolo como si fuese una mesa de bar, haciéndonos participes de sus bromas, de lo que piensan y lo que no.
La poesía y la música son pilares en el show, donde cualquiera de los intérpretes interviene en el otro,  dejando su huella.
Sobrevuela mucho más que arte. Hay algo que emana desde sus voces, que no es un line up, guión o estructura, no son monólogos armados, ni gags, son ellos. Maravillosamente ellos, libres de todo, descontracturados.  
Mi mesa se extendió a otras mesas, éramos muchos amigos sumergidos en esto. Y el hielo se nos diluía en la copa, porque no podíamos dejar de mirarlos.
Stand Down Poético, es lo mejor que vi en este tiempo, la conjunción de la poesía, la música, la diversión.  Con amigos, solo o con pareja, la mejor noche que se puede imaginar.
Qué pibes éstos, me volví pensando y sonriendo. Una celebración de la amistad.

César Debernardi, Fabricio Simeoni y Pablo Castro Leguizamón ellos son Stand Down Poético.